domingo, 9 de diciembre de 2012

Más allá de los sueños

"Volveré a por ti. Volveré a buscarte. Siempre."


- ¿Y cuándo vendrás?

Él le devolvió la sonrisa.

- ¿Aún no me he ido, y ya me echas de menos?
- Tal vez es porque no quiero que te vayas...
- Pero no me voy. Nunca me iré. Siempre estaré aquí, contigo.

Y puso su mano, la de él, en su corazón, el de ella. Y tomó su mano, la de ella, y la puso sobre su corazón, el de él.

- De la misma manera -explicó- que tú siempre estarás aquí, conmigo.

Suspiro. Sonrisa tonta.

- Prométeme que volverás.
- Lo haré. Siempre volveré a ti. Siempre te encontraré.
- Entonces, vete. Y cumple con tu destino.
- Volveré a por ti. Volveré a buscarte. Siempre.
- Siempre.

Se aleja. Un reflejo, una nube de humo, un vaivén, y desaparece. Un rayo de sol. Un brillo de esperanza. Una luz en el corazón.

Un anhelo de que volverá. Una esperanza de que lo hará. Una promesa de un amor verdadero que retornará.

Y despiertas, y sucumbes de nuevo al sueño. Y otra vez, y otra, y otra más.

Con un enfoque difuminado enmarcando tus recuerdos y decorando tus lágrimas.

Con una mano en el corazón y otra en la suya. Que los sueños, sueños son; y la pesadilla, ya pasó.

"Y ahora duerme, princesa, que por ti ya velo yo."

lunes, 3 de diciembre de 2012

Esta noche dominaremos el mundo

"Esta noche dominaremos el mundo."


Esta noche dominaremos el mundo.

Lo haremos sin prisas, y sin remordimientos. Lo haremos despacio, sin miramientos. Tú no mirarás, y yo volveré la vista. Lentamente, paso a paso; una caricia, un beso. Un lejano gemido, un suspiro. El aroma -tu aroma-, en mi cuerpo, en mi abrazo. En mi boca, tu boca; tu lengua, lus labios. En mi cuello, tu boca; tu lengua, tus labios.

Esta noche dominaremos el mundo.

Escalofrío. Sensación. Cerrar los ojos, sentir. Sentir.

Y júrame bajo este techo que lo nunca dicho volverá, y hazme mía en mi morada y tuya en mi soledad.

Esta noche... dominaremos el mundo.