lunes, 30 de enero de 2012

There's something...

"Y todo lo demás, no importa."

  Hay algo, más allá de las estrellas, que me hace sentir bien. Y si tú sonríes, yo sonrío, pues el calor de una sonrisa amiga es la más pura expresión de una amistad verdadera, cercana y reconfortante. Y todo lo demás, no importa; pues mientras tengamos esta expresión de felicidad compartida, todo podrá salir bien. O, al menos, mantendremos los buenos ánimos para ello.

There is something, beyond the stars, who makes me happy if I starring at them, thinking on you, every night before going to bed. It's magic, or at least I think so. Because you are so far away from me that I can't just understand why I feel you are always beside me -looking after me, and that is so nice for everyone... Well, anyways, it doesn't matter why, or how. The fact is -as you say aaaalways to me- you had never ever let me down. Thank you, really. I will try to do the same for you, but -please- promise me you will forgive me if... No. I would rather prefer another promise: promise me we will be always together, forever and ever (yes! like a fairy tale). But, of course, you already knew all of that ;)

Y todo lo demás, no importa.

domingo, 29 de enero de 2012

El corazón más bonito del mundo

"Cada persona que ha pasado por mi vida ha tomado, intercambiado o mutilado un pedacito de mi corazón."

    Había una vez un chico que viajaba con un circo, recluído en una urna de cristal. No hablaba con nadie, y no tenía relaciones de ningún tipo. Se pasaba el día dando brillo a su impoluto corazón. Horas, minutos, segundos, ¡semanas! Su dedicación era grandiosa. Un día, el circo llegó a un pueblo. Y allí, en la plaza, el chico mostró su corazón, presentándolo como el corazón más bonito del mundo.

- Eso no es verdad -dijo un viejo que se había acercado-, tampoco es tan bonito. Aun más, resulta hasta feo.
- ¿Acaso ha visto un corazón más bonito que éste? -preguntó el chico, asombrado y perplejo.
- -respondió el viejo, reflexionando.

Y entonces sacó el suyo propio. Su color abarcaba diversas tonalidades de rojo, y estaba lleno de remaches en cuero, tela y metal. Le faltaban cachos, y tenía cicatrices y heridas. Todo junto era pequeño y se veía que lo habían intentado recomponer. El chico lo observó, confuso.

- ¿Cómo puede decir que eso es bonito?
- Verás -explicó el viejo-, cada persona que ha pasado por mi vida ha tomado, intercambiado o mutilado un pedacito de mi corazón.

El viejo sonrió. Era una sonrisa sabia, cansada. Entonces el joven, partiendo un trocito de su corazón, se bajó de su urna y rellenó un hueco del corazón del viejo. Y sonrió también, compartiendo juntos una misma sonrisa... y un mismo corazón.

© Cuento popular
[Adaptación]

sábado, 28 de enero de 2012

Y antes de pasar página...

"Me dejé el marcapáginas, y tuve que volver a buscarlo."

Ah, se me olvidaba.

Quería olvidarme de todo y pasar página.

Pero ocurrió algo: me dejé el marcapáginas en las hojas de atrás, y tuve que volver a buscarlo.

Yo no soy

"Los girasoles se apagarán si ya no sale el sol."

Y el mundo se cierne sobre nosotros, y bostezo despacio. Me tiendes la mano, me agarro a tu brazo. La noche está fría por aquí, comentan. Pero qué importa eso. Qué importa el espacio. Ya no tirito, ya no tiemblo, no me estremezco, no hay frío ni miedo. Si tú estás, yo estoy; y si tú no estás, desaparezco.

Podrá cerrarse el día, y gritaré tu nombre al viento; reiré contigo, juntos, y callaremos nuestro eco. Los girasoles se apagarán si ya no sale el sol, y la lluvia de los árboles irá a parar al cielo. Quizás las luciérnagas sueñen luces desnudas, o quizás las luces se apaguen si no sienten tu calor. Tal vez sí, tal vez no. Porque si tú estás, yo estoy; y si no estás, yo no soy.

viernes, 20 de enero de 2012

Volver

"Donde los árboles son árboles y siempre hay luz."
- ¡Vuelve!
- ¿A dónde?
- No lo sé.

Se quedó pensativo un momento.

- Al país donde regresan los sueños. Donde nunca desaparecen. Donde crecen como el algodón dulce. Donde los árboles son árboles y siempre hay luz.

Silencio.

- ¿Volverás tú conmigo?
- Siempre he estado aquí, esperando.

Asintió.

- Entonces, volvamos.

Y volvieron.

domingo, 15 de enero de 2012

Niñita sonrisas y tipo pirado

"No tengo gorro ni cacerola"

Hace frío, el tiempo vuela. En la calle, niebla. Un tipo saluda, parado, a toda gente que por su lado pasa. Nadie se fija, nadie repara -en él. Pasan las horas, las luces cambian. Una niñita se acerca; niñita sonrisas y tipo cansado.

- ¿Qué hace aquí, maestro?

- No tengo gorro ni cacerola.

Pregunta inocente y respuesta clara. Y el tipo se acerca a un árbol y desata una piruleta, y la niñita se marcha dulce en mano. Y el tipo se abriga, y continúa entonando su "buenas noches, ciudadanos, sigan pasando de largo". A lo lejos, la niñita, ha cultivado una sonrisa. Quizás no sea más que el comienzo de un mejor porvenir.

miércoles, 4 de enero de 2012

El brillo azul de una libélula

"Pero solo conseguí el brillo azul de una libélula"
Ella, él.
- ¿Qué me has traído?
- ¿Y tú? ¿Qué me has traído?
- Una llave.
- Es muy bonita. ¿Qué abre?
- La luna.
- Ah, podría serme muy útil.
- Eso mismo pensé yo. Así, si hay una puerta en la luna, podrás abrirla. Aunque yo no fomentaría esa clase de comportamiento insensato.
- Te he traído un poco de pan. Y una botella de agua.
- Esto también es muy bonito. ¿Qué hay en el agua?
- Flores. Y el trozo de la luna que no está en el cielo esta noche. Lo he metido también.
- Yo ya mencioné la luna.
- Entonces, solo flores. Y el brillo del cuerpo de una libélula. Yo quería un trozo de luna, pero solo conseguí el brillo azul de una libélula.
- Es maravillosa.

© El nombre del viento, Patrick Rothfuss
[Adaptación, capítulo 53]